Tan pronto como fue controlado el incendio en Hawái, la indignación de los habitantes resonó entre las autoridades: no sonaron las sirenas que debían alertar a los isleños del peligro y, a falta de electricidad, no pudieron recibir información sobre la tragedia que se aproximaba. La fiscalía general de Hawái anunció la apertura de una investigación sobre el incendio, incluyendo la «toma de decisiones críticas» cuando el fuego ya se extendía.
«¿Sabes cuándo supimos que había un incendio? Cuando estaba enfrente de nuestra calle», dijo a la AFP una habitante de Hawái en el estacionamiento del Complejo Memorial de Guerra de Maui, adaptado como centro de refugio para las víctimas de la tragedia que ya cobra 93 muertos. «La montaña atrás de nosotros se prendió en fuego y ¡nadie nos avisó!», reclamó Reed.
La causa del terrible incendio está bajo investigación, pero expertos afirman que su rápida propagación fue favorecida por circunstancias como la abundancia de plantas no nativas, la topografía volcánica que favoreció vientos secos ladera abajo, un invierno inusualmente seco y un huracán a algunos kilómetros al suroeste.
Pero tratándose de Hawái, une estado bajo una constante actividad tectónica al origen de terremotos, volcanes activos, tsunamis y golpeado regularmente por poderosas tormentas tropicales, la falta de aviso por parte de las autoridades causa desconcierto y lleva a muchos a la ira.
Negligencia del gobierno
«Subestimamos la peligrosidad y la velocidad del fuego», admitió el sábado Jill Tokuda, legisladora del Partido Demócrata por Hawái, en declaraciones a CNN.
«No es que los vientos huracanados sean desconocidos en Hawái, o la maleza seca, ni las condiciones de alerta roja. Vimos esto antes con (el huracán) Lane. No aprendimos […] que los incendios de matorrales pueden estallar como resultado de vientos huracanados», comentó Tokuda.
El incendio dejó sin electricidad a los residentes de Lahaina, que han dicho a los medios de comunicación que no tenían señal en sus teléfonos celulares, un canal que usan las autoridades cuando quieren alertar a los ciudadanos del peligro.
El mismo apagón eléctrico pudo, sin duda, haber limitado la capacidad de los residentes para ver televisión o escuchar la radio, pero las sirenas exteriores de advertencia, más potentes y que deben alertar a los isleños del peligro no sonaron, dijo el viernes la administración se servicios de emergencias de Hawái (HI-EMA).
Por esta razón, la fiscal general de Hawái, Anne Lopez, anunció el viernes la apertura de una investigación sobre el incendio, incluyendo la «toma de decisiones críticas» cundo el fuego se extendía.
Con AFP