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Dos personas fallecidas, entre ellos, un niño de 4 años, son las consecuencias fatales del deslizamiento de la loma en el barrio «Delgadillo y Novena» En Esmeraldas
Dos personas fallecidas, entre ellos, un niño de 4 años, son las consecuencias fatales del deslizamiento de la loma en el barrio «Delgadillo y Novena», zona alta del centro de la ciudad de Esmeraldas. En ese lugar, a consecuencia de la fuerte lluvia que soportó la ciudad durante la noche del viernes y madrugada de este sábado, la tierra cedió e ingresó de manera violenta a una casa de dos pisos, donde según vecinos del lugar vivían cinco personas.
Afortunadamente, dos de ellos lograron salir y su condición de salud es estable, sin embargo, tres quedaron atrapados bajo los escombros. Uno de ellos fue rescatado por los valientes bomberos y trasladado de inmediato a una casa de salud para recibir atención médica. Lamentablemente, los otros dos ocupantes de la vivienda no corrieron con la misma suerte y perdieron la vida en el trágico incidente. Entre ellos se encontraba un pequeño de tan solo 4 años de edad, una pérdida devastadora para la comunidad.
Ante esta emergencia, diversos organismos de socorro se hicieron presentes para brindar asistencia. El Cuerpo de Bomberos y la Policía Nacional trabajaron arduamente en las labores de rescate, mientras que también se contó con la presencia del personal de CNEL, la empresa eléctrica de la ciudad. La colaboración coordinada de estos equipos fue fundamental para atender la situación de manera eficiente y rápida.
Es importante destacar que esta zona, conocida como «Delgadillo y Novena», ahora lleva el nombre de «Delgadillo y Mary Mosquera», debido a un cambio de nombre realizado por la administración municipal anterior. No es la primera vez que se registra un deslizamiento de tierra en este lugar, lo que indica que existen problemas estructurales que deben ser abordados de manera urgente.
Este triste suceso es un recordatorio de la importancia de tomar medidas de prevención y precaución frente a las condiciones climáticas extremas. Los fenómenos naturales, como las fuertes lluvias, pueden desencadenar tragedias como esta, y es responsabilidad de las autoridades y la comunidad estar preparados y tomar acciones para minimizar los riesgos.
La pérdida de vidas humanas, especialmente la de un niño inocente, es una tragedia que deja un profundo dolor en la sociedad. Es necesario que las autoridades locales realicen una evaluación exhaustiva de la zona afectada y tomen medidas para evitar futuros deslizamientos de tierra. Asimismo, es fundamental brindar apoyo y acompañamiento a las familias afectadas, quienes están enfrentando un momento de profundo dolor y pérdida.
La solidaridad y el apoyo de la comunidad es crucial en momentos como estos. Es necesario unir fuerzas para brindar consuelo y asistencia a los afectados, así como para trabajar en la prevención de futuros desastres. La seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos deben ser una prioridad, y es responsabilidad de todos trabajar juntos para lograrlo.
Entre las personas heridas están, Dereck Góngora, Axel Góngora y quien sería el dueño de la vivienda Jefferson Góngora.