Internacional
Trump anuncia la «Cúpula Dorada», un escudo antimisiles de 175.000 millones de dólares para proteger EE.UU.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presentó este martes los planes iniciales para la «Cúpula Dorada», un ambicioso sistema de defensa antimisiles destinado a «proteger la patria» contra amenazas balísticas, hipersónicas y de crucero provenientes de adversarios como China, Rusia, Irán y Corea del Norte. En un anuncio desde la Casa Blanca, acompañado por el secretario de Defensa, Pete Hegseth, y el general Michael Guetlein, vicejefe de operaciones espaciales, Trump comprometió 25.000 millones de dólares iniciales para el proyecto, estimando un costo total de 175.000 millones de dólares y una finalización en tres años, antes del término de su mandato en 2029.
Inspirado en el sistema Cúpula de Hierro de Israel, pero con tecnología “mucho más avanzada”, según Trump, el sistema integrará interceptores espaciales, sensores satelitales y defensas terrestres y marítimas existentes, como el sistema Aegis y los misiles THAAD de Lockheed Martin. Trump destacó que la Cúpula Dorada será capaz de interceptar “casi el 100% de los misiles, incluidos los hipersónicos”, incluso aquellos lanzados desde el espacio o desde cualquier parte del mundo. El diseño, liderado por la Fuerza Espacial bajo Guetlein, incluirá entre 400 y 1.000 satélites para detección y rastreo, más 200 satélites de ataque equipados con misiles o láseres, según fuentes del Pentágono citadas por Reuters.
El presidente afirmó que Canadá ha expresado interés en formar parte del proyecto, lo que podría implicar una colaboración bilateral para fortalecer la defensa de América del Norte, aunque no se detallaron los términos. “Ayudamos a Israel a construir su Cúpula de Hierro, y lo haremos en nuestro país, creando el mejor sistema de la historia, 100% hecho en EE.UU.”, aseguró Trump, destacando que la tecnología superará la del sistema israelí, financiado parcialmente con 3.000 millones de dólares estadounidenses desde 2011.
Sin embargo, expertos y críticos han cuestionado la viabilidad y el costo del proyecto. La Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO) estima que una red de interceptores espaciales podría costar entre 161.000 y 542.000 millones de dólares en 20 años, superando ampliamente la proyección de Trump. Laura Grego, de la Unión de Científicos Preocupados, advirtió que se necesitarían hasta 16.000 interceptores para contrarrestar un ataque de 10 misiles balísticos intercontinentales (ICBM), calificando el sistema como “costoso y vulnerable”. Además, el analista Jeffrey Lewis señaló que la Cúpula de Hierro de Israel, diseñada para proyectiles de corto alcance en un país 400 veces más pequeño, no es comparable con las necesidades de EE.UU., que enfrenta misiles hipersónicos y de largo alcance.
El proyecto, que retoma ideas del programa “Star Wars” de Ronald Reagan, ha generado entusiasmo entre contratistas de defensa como Lockheed Martin y SpaceX, esta última liderada por Elon Musk, quien, pese a desmentir un rol directo, es considerada favorita para construir la constelación de satélites. Sin embargo, legisladores demócratas, como la senadora Jeanne Shaheen, han expresado preocupación por posibles conflictos de interés, dado el rol de Musk como asesor de Trump y su donación de 270 millones de dólares a su campaña.
Trump prometió que la Cúpula Dorada estará operativa antes de 2029, integrándose con sistemas existentes y completando el trabajo iniciado por Reagan hace 40 años. El Congreso ya ha asignado 27.000 millones de dólares en el presupuesto de defensa de 2025 para iniciar el desarrollo, incluyendo 7.200 millones para sensores espaciales y 5.600 millones para interceptores, según un funcionario del Congreso. No obstante, las críticas persisten sobre el impacto fiscal en un contexto de déficit proyectado y la posibilidad de desencadenar una carrera armamentística con Rusia y China.