Selección de Ecuador: de la esperanza, al castigo y a la desilusión en 2022

Guayaquil (Ecuador), 29 dic (EFE).- La selección de Ecuador, tras clasificarse para Qatar 2022, fue castigada por el TAS con la reducción de 3 puntos para las eliminatorias del Mundial 2026 y, si bien, irrumpió con un histórico triunfo, se fue del Mundial catarí con la desilusión de la eliminación en la fase de grupos.

La clasificación para Catar la consiguió con una plantilla que se rearmó en plena competición, con la mayoría de jugadores inexpertos en ese tipo de desafíos pero que, al cierre del 2021, dejaron al equipo a tres puntos del objetivo.

La selección arrancó 2022 en el tercer puesto de la tabla de posiciones de las eliminatorias sudamericanas, con 23 puntos, seis más que Colombia y Perú, aunque con difíciles partidos pendientes de visitante contra Perú y Paraguay, y de local ante Brasil y Argentina.

Tras empatar por 1-1 con Brasil, sacó un decisivo punto con la igualada por 1-1 en Lima, lo que le permitió sacar a Perú de su camino, pero en Paraguay sufrió su peor derrota por 3-1, la más abultada de esa eliminatoria.

A pesar de la derrota ante Paraguay, el equipo terminó en celebración al final del partido, porque las derrotas de Perú por 1-0 ante Uruguay y la goleada por 4-0 de Brasil sobre Chile lo clasificaron.

Lo conseguido había llegado más allá de lo previsto en agosto de 2020, pues Ecuador carecía de un equipo, porque se desarmó luego de la Copa América de Brasil 2019: se encontraba sin entrenador, con el Directorio de la FEF dividido y con jugadores sin el mínimo afán para volver al combinado.

El técnico del equipo, Gustavo Alfaro, a días de las eliminatorias, tomó ese barco a la deriva, sedujo a varios jugadores de anteriores procesos para rearmarlo, y desde la Conmebol ratificaron en la presidencia de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) a Francisco Egas.

Si bien, en el cierre de las eliminatorias para ir a Catar solo empató por 1-1 ante Argentina, en Guayaquil, los ecuatorianos celebraron la hazaña lograda con un equipo que en 2020 -según Egas- se lo iba a diseñar para pelear la clasificación al Mundial de 2030.

Ecuador llegó a Catar, tras recibir un castigo desde el TAS tanto en el orden económico como deportivo, con multa y resta de tres puntos para las eliminatorias del Mundial de 2026, fruto de las reclamaciones de las Federación deportivas de Chile y Perú, que protestaron por la inclusión de Byron Castillo durante las eliminatorias.

Chilenos y peruanos argumentaron que Castillo había jugado por Ecuador con documentos falsos porque su nacimiento se habría producido en Colombia, cuando la Ley ecuatoriana, y también desde la FIFA, habían descartado el caso en forma contundente.

Ecuador, que no convocó a Castillo, tuvo un debut impactante, pues fue el primer equipo que ganó en el partido inaugural al anfitrión desde que se disputan los Mundiales, imponiéndose por 2-0 a Catar, con la reaparición goleadora de su histórico Enner Remberto Valencia, autor de los dos tantos.

Fue, sin dudas, el acontecimiento deportivo más impactante para los ecuatorianos y la ilusión se incrementó al empatar el segundo partido por 1-1 contra Países Bajos, pero la desilusión inundó a los ecuatorianos tras la derrota por 2-1 y la eliminación en el partido contra Senegal.

La incertidumbre se apoderó de los fanáticos no solo por la eliminación del equipo, sino porque se truncaría el proceso emprendido por Alfaro y reseñado en su libro «Cazadores de Utopías Imposibles» porque actualmente se encuentra en el limbo, pues su continuidad, o no, se conocerá recién en enero próximo. EFE