Edificio Fantasía ya tiene un 80% de demolición

La demolición del edificio Fantasía en Guayaquil ha avanzado significativamente, alcanzando un 80% de su estructura derribada, con solo tres pisos aún en pie. Este edificio, cuya inclinación representaba un riesgo para la seguridad pública, ha sido objeto de un esfuerzo concertado por parte del Municipio para su desmantelamiento controlado y seguro.

• Progreso de la Demolición: Los trabajos, que se llevan a cabo desde la calle 9 de Octubre, entre Esmeraldas y José Mascote, han implicado la movilización de más de 4,000 toneladas de escombros a través de 151 viajes de volquetas municipales. Este proceso ha requerido la colaboración de obreros usando herramientas especializadas, enfrentándose a desafíos como los cortes de energía, sin embargo, el trabajo ha continuado de manera incesante, respetando los plazos establecidos.
• Seguridad y Estabilización: Antes de comenzar la demolición, el Municipio tomó medidas para cercar y estabilizar el edificio, asegurando así la seguridad de los trabajadores y del público en general. La retirada de las vigas de estabilización se hizo una vez que la estructura había sido suficientemente reducida en altura, y aún queda por remover los bloques de anclaje, una tarea crítica para la conclusión del proceso.
• Objetivos y Fechas: La meta es completar la demolición total a finales de octubre, lo cual no solo implica derribar lo que reste del edificio sino también gestionar la remoción completa de los escombros y los elementos de anclaje. Este trabajo busca devolver la tranquilidad al sector y asegurar que la Ciudad de Todos pueda seguir su vida sin el temor de estructuras peligrosas.
• Impacto Comunitario: La acción del Municipio de Guayaquil refleja un compromiso con la seguridad de sus ciudadanos y con la mejora del entorno urbano. La demolición de estructuras inestables como el edificio Fantasía es esencial para prevenir posibles tragedias y para la renovación urbana, contribuyendo a la imagen y seguridad de Guayaquil.

El proceso de demolición del edificio Fantasía es un ejemplo de cómo las ciudades enfrentan y resuelven problemas de infraestructura que afectan la seguridad pública, trabajando contra reloj y bajo condiciones desafiantes para lograr su cometido.