Cristóbal Roldán: «El apoyo a la comunidad ecuatoriana debe ser fundamental»

«El apoyo a la comunidad ecuatoriana debe ser fundamental», afirma en una entrevista con Efe Cristóbal Roldán, embajador de Ecuador en España desde agosto de 2017, que se despide estos días su misión diplomática con la llegada de un nuevo Gobierno al país latinoamericano el próximo 24 de mayo.

Roldán inició su andadura en la embajada de España bajo el mandato de Lenín Moreno, y desde entonces se ha entregado en cuerpo y alma al apoyo, la ayuda y la integración de sus compatriotas en el país.

Durante estos años ha visto como la comunidad ecuatoriana en España, que a principios del siglo XXI llegó a alcanzar el millón de personas, se ha reducido a 440.000, según los datos con los que cuenta la sede diplomática, de los cuales 275.000 ya tienen la doble nacionalidad.

«Para mi ha sido de fundamental trascendencia y he tratado de apoyar en todo lo que ha estado a mi alcance para que la mayoría de los ecuatorianos puedan paliar el tremendo dolor que significa dejar a sus familias, sus raíces y embarcarse en la aventura de venir a España», subraya Roldán.

«Sin embargo, a pesar de esas adversidades, la mayoría de ellos lograron incorporarse y estar absolutamente integrados en la sociedad española», añade el diplomático que destaca que del total de ecuatorianos que viven en España, «solo 202 se encuentran en centros de reclusión penitenciaria, lo que demuestra la intención de trabajar con la que llegaron al país».

BOLSAS DE EMPLEO Y ESCUELA DEL MIGRANTE

La labor de la embajada con la comunidad ecuatoriana en España se enfocó durante la estancia de Roldán en tres áreas, entre ellas, el acceso de sus compatriotas a las bolsas de empleo, «una tarea permanente mía que trasladé a todos los consulados en el país, no solo desde Madrid», señala.

«Fue un trabajo en común y en sinergia con las autoridades españolas de las comunidades autónomas y de los ayuntamientos», dice, a través del cual se ha conseguido la incorporación de miles de ecuatorianos a sectores como a construcción, el trabajo en el hogar, el cuidado a las personas de la tercera edad, la agricultura, el transporte o la ganadería.

Además, desde la embajada en España se trabajó intensamente en la escuela del migrante, «una labor permanente que tuvimos hasta la pandemia, porque ahí se tuvo que parar», recuerda Roldán, aunque «luego online hemos logrado continuar con ella, pero básicamente fue en los tres primeros años donde logramos resultados harto positivos».

A través de la escuela, se impartieron cursos de emprendimiento, informática, inglés y mercadeo, «lo que permitió también el acceso a las bolsas de empleo. El acceso al conocimiento permite salvar las desigualdades», indica el diplomático.

Roldán subraya además la búsqueda desde la embajada de inversión extranjera para su país» una labor importantísima, que hemos logrado afianzar y dar la suficiente seguridad a las empresas españolas ya radicadas en Ecuador. Que vean que se restableció la institucionalidad allí y con ello la seguridad jurídica que debe reinar para un ambiente de absoluta tranquilidad».

Eso permitió -prosigue- que se mantuvieran las inversiones «y no solo eso, sino que se incrementaran, ya que llegaron al país sudamericano nuevas empresas como el grupo Cobra, Elecnor o ACS en hidrocarburos y energías renovables, «pero también logramos la inversión en vivienda social».

Otra de las tareas de la embajada fue la promoción de las exportaciones desde Ecuador a España, «sobre todo en temas de pescado, camarón, rosas, cacao y últimamente la exportación de 40 toneladas de café Galápagos, que tiene denominación de origen», señala Roldán.

LA LABOR DURANTE LA PANDEMIA

De los momentos más difíciles en España, recuerda especialmente la llegada de la pandemia, cuando se tuvieron que coordinar los vuelos humanitarios para sus compatriotas que se quedaron varados en territorio español por el cierre de aeropuertos y fronteras.

También en esos primeros meses, Roldán tuvo que gestionar el envío de ayuda humanitaria a su país, con donaciones de respiradores para los hospitales ecuatorianos y la búsqueda efectivo para paliar la crisis provocada por la covid-19, ya que la gran mayoría de la economía de Ecuador es informal.

No olvida tampoco la importancia que tuvo el primer viaje oficial que hizo Lenín Moreno a España, durante el que se reunió con las principales españolas, poco después de su llegada al Gobierno, y con el que se consiguió «profundizar en las relaciones entre ambos países».

Y augura que el Gobierno de Guillermo Lasso seguirá en la línea de la institucionalización del Estado de Moreno: «recuperar la libertad, que nosotros sepamos que podemos caminar libre en Ecuador sin la persecución que lamentablemente en algunos de los últimos años del presidente (Rafael) Correa se dio». EFE