La prensa constata que ya arrancó el dragado y se está ejecutando en Guayas, con los trabajos de infraestructura en el sitio donde se depositarán los sedimentos a extraer.
La prefecta Susana González junto a los medios de comunicación recorrieron las áreas en Durán, donde se construyen los muros de contención para depositar los sedimentos a extraer del río, así como otras actividades de obra civil previas al relleno hidráulico.
“El dragado arrancó y se está ejecutando ya en Guayas”, enfatizó la prefecta Susana González, quien también resaltó la importancia de esta obra para la provincia y el país.
Mencionó que la remoción de más de 6 millones de metros cúbicos de sedimentos mitigará las inundaciones, en beneficio de las familias de Guayaquil, Durán, Samborondón, Daule y Salitre. También garantizará que el alimento llegue a la mesa de los hogares de los ecuatorianos, ya que mejora la productividad, favoreciendo a los agricultores y ganaderos de la provincia. La prefecta ratificó así su trabajo a favor del bienestar y prosperidad de las familias del campo y la ciudad.
Actualmente, esta obra emblemática ya genera cientos de plazas de trabajo directo, con más del 95% de mano de obra nacional.
Luis Cedeño, director de obra por el consorcio Dragando por Guayas, explicó que se han construido ya varias áreas de depósitos en los 3 macrolotes donde se depositarán los sedimentos. Dijo que cuando llegue la draga y una vez instaladas las tuberías, comenzará el bombeo.
“Se está demostrando realmente que empezamos desde hace algunos meses atrás en este contrato. Con esto también demostramos que el dragado va porque va”, señaló.
Susana González recordó, asimismo, que el contrato suscrito por $ 44’016.862,35, representa un ahorro de $ 63 millones que, según afirmó, sirven para ejecutar obras complementarias y acciones que hoy favorecen a los guayasenses y a habitantes de zonas de otras provincias.
“Esta obra beneficia a más de 28 ciudades y a 8 provincias, es decir, involucra al Ecuador entero. La última vez que se dragó la ría Guayas fue en el año 1968, un acto de irresponsabilidad de los gobiernos a lo largo de más de medio siglo”, cuestionó.
“Ese islote de El Palmar es el mayor de los monumentos a la indiferencia de los gobiernos centrales de los últimos 50 años y que, lamentablemente, endosaron esa indiferencia al ser humano, porque castigaron la posibilidad a los sectores productivos”, sostuvo.
Afirmó que “hoy, después de 2 años, este Guayas renace en la productividad y el bienestar de nuestra gente, con la seriedad que todos queríamos que se administre esta provincia, con el respeto a la dignidad y el anhelo de cada ser humano de salir adelante”.
A fines de octubre, y como un homenaje por las fiestas de Guayaquil, la draga y la maquinaria para realizar la extracción de sedimentos llegará procedente de China.
