Nacional
Plan Fénix podría permitir la deportación de presos extranjeros de cárceles ecuatorianas a sus países
El presidente Daniel Noboa ha anunciado una nueva medida dentro del Plan Fénix que promete solucionar dos problemas importantes en el sistema penitenciario: el hacinamiento y el gasto público. Según declaraciones del mandatario, se procederá a enviar a sus países de origen a todos los privados de libertad de nacionalidad extranjera que cumplan condenas por delitos graves de más de cinco años.
Esta iniciativa busca reducir la sobrepoblación en las cárceles del país, que lleva varios años siendo un grave problema. Además, permitirá aliviar la carga económica que supone mantener a estos presos extranjeros en las prisiones nacionales.
El presidente Noboa enfatizó que Ecuador es un país de paz y que esta medida busca garantizar la seguridad de sus habitantes. «Se invita a todos los que quieran venir a visitarlo. Incluso hay gente que quiere venir con todas las ganas de trabajar y hacer las cosas bien, pero el que quiera hacer las cosas mal se va», afirmó.
Se estima que alrededor de 1.500 personas de nacionalidad venezolana, colombiana y peruana serán afectadas por esta medida. En este sentido, la Cancillería ya ha iniciado acercamientos con sus homólogos de estos países para coordinar las acciones necesarias que permitan el traslado de los presos a sus respectivas naciones.
No obstante, antes de proceder con la deportación, se realizará un censo exhaustivo para confirmar el número exacto de presos extranjeros y verificar cuántos de ellos cumplen con las condiciones para ser enviados a su país de origen.
El Plan Fénix continúa avanzando en su objetivo de transformar el sistema penitenciario ecuatoriano y garantizar la seguridad de la población. La deportación de los presos extranjeros representa un paso importante en este proceso, aunque aún queda por definir los detalles y plazos para la ejecución de esta medida. Sin duda, será necesario un trabajo conjunto entre las autoridades nacionales y los países de origen de los presos para asegurar una correcta coordinación y cumplimiento de las condenas en sus respectivas naciones.