El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha manifestado su preocupación ante el reciente asalto perpetrado por las fuerzas de seguridad de Ecuador a la Embajada de México en Quito. El incidente ha generado una respuesta contundente de la comunidad internacional, que resalta la importancia de respetar la inviolabilidad de los recintos diplomáticos en conformidad con el derecho internacional.
El pasado acontecimiento ha suscitado una ola de condena y alarma, con Guterres enfatizando la necesidad imperiosa de salvaguardar la integridad de las misiones diplomáticas como un principio fundamental en las relaciones entre Estados.
El respeto a la inviolabilidad de las embajadas se erige como una norma básica consagrada en la comunidad internacional para proteger la diplomacia y promover un ambiente de confianza y respeto mutuo entre naciones.
La reacción de la ONU resalta la gravedad de la reciente violación de la inviolabilidad de la Embajada de México en Quito, instando a todas las partes involucradas a actuar con prudencia y observar los protocolos establecidos en los tratados internacionales. Este incidente pone en tela de juicio la estabilidad y el respeto a las normas de convivencia entre Estados, subrayando la necesidad de un diálogo constructivo y el apego riguroso al derecho internacional.
México, por su parte, ha reafirmado su postura de recurso a instancias judiciales y diplomáticas para hacer valer sus derechos tras la clara y lamentable violación de su embajada en Ecuador. La comunidad internacional observa con atención el desenlace de este caso, que ha puesto en relieve la importancia de proteger la sacrosanta institución de la diplomacia y salvaguardar el respeto a las misiones diplomáticas como espacios de diálogo y cooperación entre naciones.
