El 16 de abril se cumplirán 8 años desde que un devastador terremoto de 7.8 de magnitud sacudió Pedernales, Manabí, Ecuador, a las 18:58 pm. Aquel trágico día marcó la vida de miles de personas y dejó una profunda huella en la región.
Las imágenes de lo ocurrido horas después de ese terrible evento en el año 2016 siguen grabadas en la memoria de quienes presenciaron la destrucción y el caos que dejó a su paso el sismo. Edificios derrumbados, calles destrozadas, familias buscando a sus seres queridos entre los escombros… fue un escenario desgarrador que puso a prueba la fortaleza y solidaridad de todo un país.
A lo largo de estos 8 años, la comunidad de Pedernales y las zonas afectadas han demostrado una admirable capacidad de recuperación y reconstrucción. A pesar de las adversidades, se han unido para trabajar juntos en la reconstrucción de sus hogares, sus vidas y su esperanza de un futuro mejor.
El recuerdo de aquel trágico terremoto nos invita a reflexionar sobre la importancia de la prevención, la resiliencia y la solidaridad en momentos de crisis. Nos recuerda la fragilidad de la vida y la importancia de estar preparados para afrontar situaciones de emergencia.
En este octavo aniversario, recordamos a las víctimas del terremoto de Pedernales, honramos su memoria y renovamos nuestro compromiso de seguir apoyando a las comunidades afectadas en su camino hacia la reconstrucción y la esperanza.
Que este aniversario sea un recordatorio de la fuerza y la unidad que pueden surgir incluso en los momentos más oscuros, y que nos inspire a seguir adelante con determinación y solidaridad en la construcción de un mejor futuro para todos.
