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CELEC Ecuador declara emergencia y toma medidas para evitar apagones
La Corporación Eléctrica de Ecuador (CELEC) ha sido declarada en emergencia por su gerente, Fabián Calero, como respuesta a la crisis eléctrica que enfrenta el país. Ante la necesidad de garantizar el suministro de energía eléctrica y prevenir posibles apagones, la entidad ha tomado medidas urgentes para abordar la situación. Una de las acciones más destacadas es la autorización por parte de Fabián Calero para la contratación de 475 megavatios de electricidad.
Esta producción adicional se llevará a cabo mediante la adquisición de motores y el alquiler de barcazas, como parte de un plan integral para reforzar la capacidad energética del país. Para llevar a cabo este proceso, CELEC utilizará el presupuesto general del Estado, lo que implica la colaboración del Ministerio de Finanzas para asegurar los recursos necesarios.
La crisis eléctrica actual ha requerido una respuesta rápida y contundente por parte del Gobierno, con el objetivo principal de evitar interrupciones en el servicio eléctrico que puedan afectar a la población y a la economía del país. La emergencia declarada por CELEC pone de manifiesto la importancia estratégica de garantizar un suministro eléctrico estable y seguro para Ecuador.
Las medidas adoptadas reflejan el compromiso de las autoridades y de la empresa eléctrica con la gestión eficiente de recursos y la planificación a largo plazo en el sector energético. La situación actual plantea un desafío inmediato para CELEC y demás entidades involucradas en el sistema eléctrico del país. La coordinación y el trabajo conjunto entre las instituciones públicas, el sector privado y la sociedad en su conjunto serán fundamentales para superar esta crisis y asegurar un suministro eléctrico confiable y sostenible en el futuro.
La declaración de emergencia por parte de CELEC y las acciones tomadas en respuesta a la crisis eléctrica demuestran la capacidad de adaptación y resiliencia del sector energético en Ecuador frente a desafíos inesperados. La prioridad en este momento es garantizar la estabilidad y la seguridad en el suministro de energía, protegiendo así el bienestar y el desarrollo del país en su conjunto.