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Gobierno Nacional de Ecuador Afianza Bases para la Estabilidad Energética a Largo Plazo

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Paute, Azuay – El Gobierno Nacional de Ecuador, a través del Ministerio de Energía y Minas, ha establecido en su primer año de gestión las fundamentos para la recuperación y sostenibilidad del sector eléctrico. El presidente Daniel Noboa Azin visitó este martes 14 de enero la central hidroeléctrica Paute – Molino, parte del Complejo Hidroeléctrico Paute Integral, que junto con Mazar y Sopladora, aporta 1.757 MW al sistema eléctrico nacional.

Durante la visita, acompañada por la ministra interina de Energía y Minas, Inés Manzano, se revisaron estrategias para mejorar la operatividad y asegurar la eficiencia de las centrales a corto, mediano y largo plazo, preparándose para eventuales periodos de sequía. Manzano subrayó el avance en la recuperación de los niveles de agua en los embalses, faltando solo cuatro metros en Molino y ocho en Mazar para alcanzar sus cotas máximas, lo que es crucial para maximizar la capacidad operativa y garantizar un suministro continuo.

«Este es un gobierno de gestión», afirmó Manzano, destacando no solo la recuperación de unidades de generación termoeléctrica sino también otras acciones como la pronta operación de la central Alluriquín y la compra de energía a Colombia.

Fabián Calero, viceministro de Electricidad y Energía Renovable, detalló el trabajo intensivo diario para recuperar los embalses y optimizar la operación de las unidades de generación, incluyendo el aumento de la generación termoeléctrica para conservar el agua en los embalses durante el día.

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El plan estratégico del Ministerio de Energía y Minas y la Corporación Eléctrica del Ecuador (CELEC EP) ha permitido la reactivación de unidades de generación térmica, sumando 696.7 MW al servicio hasta diciembre de 2024, de los cuales 187,3 MW son hidroeléctricos y 509,4 MW térmicos. Además, se ha beneficiado de mejores condiciones hidrológicas en la cuenca amazónica, mejorando la operación de otras centrales hidroeléctricas.

La presa Mazar, clave para el Complejo Paute Integral, asegura la operación de las tres centrales durante 90 días incluso con niveles mínimos de sus ríos afluentes, demostrando la planificación y gestión efectiva para la estabilidad energética del país.