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Fuertes Lluvias en Ecuador: 108.294 Afectados y 20 Fallecidos Hasta el 18 de Marzo
Las intensas lluvias que azotan Ecuador desde enero han dejado un saldo devastador en 23 de las 24 provincias del país, según el más reciente informe de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR). Hasta las 07:00 de este martes 18 de marzo, se reportan 108.294 personas afectadas, 20 fallecidos y 96 heridos, con Manabí como la provincia más golpeada, seguida por Guayas, Los Ríos y El Oro.
El reporte detalla 1.818 eventos adversos registrados en lo que va del año, siendo los deslizamientos (41%), las inundaciones (38%) y los colapsos estructurales (6%) los más recurrentes. Estas condiciones han generado una crisis humanitaria y estructural: 12.922 personas están damnificadas, 29.915 viviendas han sido afectadas y 140 destruidas. Además, se han reportado 32 puentes dañados y 91,55 kilómetros de vías afectadas, complicando la movilidad y el acceso a las zonas más impactadas.
La situación hidrológica es alarmante, con 13 ríos desbordados en las provincias de Guayas y Los Ríos, incluyendo el río Babahoyo en Urdaneta y el río Puca en Balzar, que han inundado comunidades enteras. Otros 30 afluentes muestran una tendencia creciente en El Oro, Guayas, Los Ríos y Esmeraldas, según el monitoreo del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI). En Manabí, el río Portoviejo sigue causando estragos en cantones como Rocafuerte y Tosagua, mientras que en Guayas, sectores urbanos como Durán enfrentan anegaciones severas.
Las autoridades han intensificado las labores de respuesta. El Bloque de Seguridad, integrado por Policía Nacional y Fuerzas Armadas, realiza operativos de evacuación y entrega de asistencia humanitaria, que supera los 195.000 bienes distribuidos, incluyendo kits de alimentos y agua potable. Sin embargo, la magnitud de la emergencia supera los recursos disponibles, y el presidente Daniel Noboa ha anunciado medidas como bonos de vivienda y subsidios agrícolas para mitigar el impacto.
La SNGR y el INAMHI exhortan a la población a mantenerse alerta, evitar zonas de riesgo y seguir las recomendaciones de prevención, como elaborar planes familiares de emergencia y preparar mochilas con provisiones básicas. Con pronósticos de lluvias persistentes hasta finales de marzo, la crisis podría agravarse en las provincias costeras, donde la saturación del suelo y los ríos desbordados mantienen en vilo a miles de familias.
