Internacional
La izquierda seguirá gobernando Montevideo y el resto de Uruguay es «blanco»
Montevideo, 27 sep (EFE).- El Frente Amplio (FA), coalición de izquierda que gobernó Uruguay entre 2005 y 2020 y lo hace en Montevideo desde 1990, seguirá al frente de la Intendencia capitalina, mientras que 13 de los 18 departamentos (provincias) restantes estarán regidos por el Partido Nacional (centroderecha).
No obstante, los departamentos en los que ha ganado el FA, Montevideo, Canelones y Salto, concentran unos 2,2 de los 3,5 millones de habitantes del país.
Uruguay celebraba este domingo comicios para elegir a los gobernantes de 19 departamentos y 125 municipios y un 85 % de los 2,7 millones de personas habilitadas para el voto acudió a las urnas en una cita que quedó aplazada desde mayo y que estuvo marcada por el protocolo sanitario para evitar los contagios por COVID-19.
El país suramericano se convirtió en el quinto de América en tener elecciones durante la pandemia, después de San Cristóbal y Nieves, Jamaica, República Dominicana y Surinam, y se midió a esta jornada con unas cifras optimistas en cuanto al control sanitario, con 2.008 casos (233 activos) y 47 fallecidos desde el 13 de marzo.
COSSE, INTENDENTA DE MONTEVIDEO
A falta del escrutinio definitivo, las proyecciones y los mensajes de felicitación de sus principales adversarios sirvieron para confirmar que Carolina Cosse será la segunda mujer que alcanza la Intendencia (gobierno regional) de Montevideo.
La que fuera ministra de Industria, Energía y Minería entre 2015 y 2019 obtendría el apoyo más alto del FA sobre sus correligionarios Álvaro Villar y Daniel Martínez -intendente capitalino entre 2015 y 2019 y candidato presidencial en 2019- y sucedería a Ana Olivera, quien ocupó ese cargo entre 2010 y 2015.
En rueda de prensa, Cosse agradeció las llamadas de felicitación que recibió de parte del presidente y la vicepresidenta de la República, Luis Lacalle Pou y Beatriz Argimón, respectivamente.
Asimismo, anunció que desde este lunes comenzará a reunirse con diversos actores para formar un gobierno capitalino paritario en cuanto a género y con hincapié en «limpieza, movilidad y trabajo», a la vez que «una preocupación constante por la cultura, la innovación y la participación».
LA SALUD, EL CENTRO DE LAS MIRADAS
Miles de personas festejaron en las calles -muchas de ellas sin protección alguna- la victoria del FA en Montevideo, contraviniendo las indicaciones de las autoridades sanitarias, que llamaron desde el comienzo de la jornada a la responsabilidad cívica.
Estos comicios estaban programados para el 10 de mayo, pero, para evitar más contagios en un día de posibles aglomeraciones, se decidió su aplazamiento hasta este domingo 27 de septiembre.
En la jornada rigió un protocolo sanitario establecido por la Corte Electoral, en colaboración con el Ministerio de Salud Pública, por el que los votantes debían acudir con mascarilla -aunque no existía prohibición expresa en caso de no llevarla- y se recomendaba distancia de seguridad y uso de alcohol en gel.
Además, se dictaron varias normas a la hora de emitir el sufragio: enseñar la credencial de identidad y no entregarla, no cerrar el sobre con saliva y destaparse unos segundos el rostro para proceder a la identificación personal.
La celebración -este viernes- de la Marcha de la Diversidad, en la que decenas de miles de personas se congregaron en Montevideo sin distancia de seguridad y muchas de ellas sin tapabocas -al contrario de lo recomendado por los organizadores-, y un caso positivo -el sábado- en el fútbol uruguayo hicieron saltar las alarmas en un país que hasta ahora ha controlado bien la pandemia.
Las autoridades también estuvieron en alerta por los desplazamientos a los departamentos para votar y la llegada de uruguayos desde Argentina y Brasil, si bien el Ministerio del Interior difundió que solo 212 personas ingresaron al país.
EL INTERIOR DEL PAÍS ES «BLANCO»
El interior del país, que en Uruguay significa todo lo que no es Montevideo, es «blanco», como se conoce al Partido Nacional (PN, centroderecha), el de Lacalle Pou.
En 2015, el PN ganó en 12 departamentos; el FA en 6 y en 1 el Partido Colorado (PC, centroderecha). En esta ocasión, la coalición de izquierda ganaría en Canelones, su otro bastión histórico junto a Montevideo, y en Salto, pero ha perdido Paysandú y Río Negro y sigue en una dura pugna con los «blancos» por Rocha.
Otros nueve, Artigas, Colonia, Flores, San José, Florida, Durazno, Tacuarembó, Lavalleja y Maldonado, siguieron bajo dominio del PN y Soriano, Cerro Largo y Treinta y Tres están casi asegurados.
El PC mantiene su único feudo tradicional, Rivera, departamento fronterizo con Brasil.
Estos comicios cierran el período abierto en 2019 con las elecciones legislativas y presidenciales de octubre y noviembre -precedidas en junio por las primarias de los partidos- y concluyen inusualmente en septiembre de 2020, cuando en quinquenios anteriores los representantes locales ya gobernaban. EFE