La policía confirmó la muerte de dos uniformados y de una civil que transitaba el lugar en el momento del atentado. También se confirmó que hay al menos 10 heridos, entres los que se encuentran cuatro policías.
Las autoridades informaron que este miércoles se registró un atentado en el municipio de Tibú, departamento de Norte de Santander, al nororiente de Colombia, dejando tres víctimas mortales.
El hecho habría ocurrido, al activarse un artefacto explosivo al paso de una patrulla de la Policía, sobre las 2:30 p.m. mientras «se trasladaba hacia las instalaciones de la base de nuestro Ejército Nacional en Tibú», indica un comunicado de la Policía.
Además de los tres fallecidos, una civil y dos policías identificados como el subintendente Ángelo Raúl Martínez Arévalo y el patrullero Andrés Idárraga Orozco, se registraron al menos diez heridos, entre uniformados y habitantes de este municipio.
Entre los heridos se encuentran el mayor Wilson Millán Triana, comandante del Distrito de Policía de Tibú; el intendente Édinson Niño Hernández, y los patrulleros Germán Yahir Gómez Monsalve, Brando Lec Coronado Aarón y Ezequiel Felipe Pérez Arciniegas.
«El primer parte médico señala que el patrullero Pérez Arciniegas tuvo que ser internado en cuidados intensivos en el Hospital Universitario Erasmo Meoz de la ciudad de Cúcuta, mientras que el mayor Millán y los otros tres uniformados se encuentran estables», indica el comunicado.
La policía indicó que los civiles heridos se trasladaron por vía aérea y que se dispuso de un equipo interdisciplinario para asistir a las familias de las víctimas.
La Gobernación de Norte de Santander rechazó el atentado, a través de Twitter: «Los nortesantandereanos no aguantamos más muertes ni acciones violentas de los grupos armados. Rechazamos los hechos que acabaron con la vida de varias personas en el municipio de Tibú, y que enlutan a sus familias y al departamento que tanto anhela la paz».
Por su parte, la Policía, además de condenar el hecho, ofreció una recompensa de hasta 200 millones de pesos (unos 45.000 dólares) a quien suministre información que permita dar con el paradero de los responsables.
