El fenómeno Milei: ‘Nadie saltó tan rápido de la televisión a las puertas de la Casa Rosada’

Los argentinos tienen cita con las urnas este domingo 22 de octubre en las elecciones generales. Son unas elecciones decisivas, puesto que se producen en medio de una crisis económica muy aguda. Además, estos comicios pueden marcar el final de la hegemonía entre los kirchneristas y los anti kirchneristas. No son dos como en los últimos comicios, sino tres, los favoritos a la presidencia con un candidato que sobresale, Javier Milei, que amenaza con romper con todo.

Los argentinos eligen entre cinco candidatos al próximo inquilino de la Casa Rosada. Compiten en la primera vuelta de este domingo 22 de octubre el ultraliberal Javier Milei (La Libertad Avanza); Patricia Bullrich, del centro derecha Juntos por el Cambio; el oficialista y actual ministro de Economía, Sergio Massa, por Unión por la Patria; la diputada de izquierda Myriam Bregman (Frente de Izquierda y de los Trabajadores Unidad) y el gobernador de Córdoba, el peronista disidente, Juan Schiaretti (Hacemos por Nuestro País). 

Por primera vez en Argentina tres bloques, y no dos, tienen posibilidades: Milei, Massa y Bullrich. Milei «ha convulsionado un poco el clima electoral, ha transformado el paisaje político después de que en las primarias, que en la Argentina funcionan como una especie de pre primera vuelta quedara primero con cerca del 30%», afirma el periodista y doctor en Historia argentino Pablo Stefanoni, autor del libro ‘La rebeldía se volvió de derecha’ (Editorial Siglo XXI, 2021)

Milei, aúpado por el hartazgo de los argentinos con la clase política tradicional 

Un éxito que se explica en parte «por la crisis económica, pero también por la sensación de cansancio respecto de estas dos experiencias previas del kirchnerismo, que fue un peronismo de centroizquierda que ha hegemonizado la política durante muchos años. Pero también respecto de la centroderecha, el gobierno de Mauricio Macri entre 2015 y 2019 terminó muy mal económicamente», agrega Stefanoni. 

El experto afirma que una parte de los argentinos piensa que todos fracasaron y que hay que darle la oportunidad a alguien nuevo. Y ese alguien es Javier Milei, un economista que se define como anarcocapitalista, para quien el Estado es el mal absoluto y hace campaña con una motosierra.

«Empezó en los platós televisivos en el 2014 y 2015, pero fue después del 2016 cuando comenzó con un discurso económico muy radical y empezó a hablar de cosas que en Argentina sonaban un poco extrañas porque no hay una tradición anarcocapitalista. Propone dinamitar el Banco Central, acabar con la casta política. Incorporó este discurso que le resultó muy productivo, muy provechoso, de responsabilizar a los políticos. Nunca hubo alguien que saltara tan rápido de la televisión, como economista televisivo, a estar a las puertas de la Casa Rosada», aclara el experto. 

Pero Milei tiene sus limitaciones. Y si bien es favorito en los sondeos, ha tenido que recular en algunas de sus propuestas y salir al paso de manera más o menos torpe de las críticas a su proyecto político que algunos califican de irrealizable. Ciertamente hay muchas similitudes entre el fenómeno Javier Milei y Donald Trump en Estados Unidos o Jair Bolsonaro en Brasil, Milei no tiene una base institucional ni territorial detrás de él, como Trump con el Partido Republicano, ni siquiera un apoyo de los grandes empresarios como lo tenía Bolsonaro. 

«No está nada claro cómo va a reemplazar el peso por el dólar en este contexto de crisis macroeconómica (casi 140% de inflación internanual según las últimas proyecciones) y sus propios asesores económicos están muy enredados, en el tema del porte de armas ya se ha retractado, ha dicho que no es posible hacerlo ahora. Entonces el problema es cómo aterriza esa utopía libertaria de extrema derecha en un proyecto de gobierno realizable», afirma Stefanoni.

Massa, malabares entre el ministerio y la candidatura 

El candidato oficialista, Sergio Massa, encara esta votación en una posición muy difícil. Tiene el reto de intentar vender algo nuevo a los electores cuando al mismo tiempo es ministro de Economía y forma parte del gobierno actual, muy criticado por la gestión económica y un aumento de la pobreza que alcanza ya al 40% de la población. 

«Es un malabarista. Como alguna vez salió escrito en un artículo, es ministro de Economía por las noches y candidato en el día, tiene la dificultad de sus cifras. Es un político hábil y pragmático. En cualquier país del mundo, un ministro en esas condiciones estaría completamente fuera de la competencia electoral. Y en su caso, si bien es muy difícil que gane, es posible que pase a la segunda vuelta y siempre las segundas vueltas un poco redefinen todo. Es un político ultra ultra pragmático. Esa es su verdadera marca y está a la espera del milagro, verdaderamente», dice el autor de ‘La rebeldía se volvió de derecha’. 

Bullrich, lastrada por la gestión de Macri 

La heredera de Mauricio Macri es la tercera candidata con posibilidades en estas elecciones. Patricia Bullrich promete un cambio sereno, previsible, más previsible que tal vez Milei, pero el balance desastroso de Mauricio Macri en el gobierno entre 2015 y 2019 puede lastrar sus opciones. «Se ubicó en la derecha de la centroderecha con un discurso más radical. Su eslogan de campaña es «Si no es todo, es nada». Tiene a favor que como ministra de Seguridad logró popularidad por su combate al delito, con posiciones más duras y en contra tiene esa herencia económica de Mauricio Macri», analiza Stefanoni. 

La candidata ha sabido conectar con esa demanda de la sociedad preocuapada por la inseguridad pública. «Esperaba ser la expresión de este descontento social y la descolocó mucho el hecho de que Milei quedara por encima de ella en las PASO. Entonces ahora está en una situación muy complicada porque tiene que ganar votos a la derecha. Esos votos que pueden ir a Milei y para eso tiene que radicalizarse, pero también tiene que ganar un voto más moderado y eso la ha dejado en una situación discursiva muy caótica. Se nota en los debates, donde incluso termina balbuceando, no termina de encontrar realmente un eje de campaña y eso es lo que conspira contra su intento. Sus posibilidades no son cero.»

En Argentina, el voto es obligatorio so pena de una multa que puede ir de 50 a 500 pesos, aunque con la inflación disparada, se puede quedar en una penalización simbólica. Para que un candidato gane ya en primera vuelta, debe conseguir el 45% de los votos o el 40% y diez puntos de diferencia con el segundo en liza. Si no se consigue, habrá una segunda vuelta el 19 de noviembre entre los candidatos que lleguen en primer y segundo lugar. 

«Si hacemos un promedio de encuestas alrededor de un 35% va para Javier Milei, un 30% va para el candidato oficialista Sergio Massa, y más o menos el 25 o 26% para la candidata Patricia Bullrich. La mayoría de los encuestadores creen que el balotaje va a ser entre Milei y Massa. La ventaja que tiene Milei es que si pasa a la segunda vuelta es probable que absorba mucho de los votos de Patricia Bullrich», pronostica Pablo Stefanoni.

#EscalaenParís también está en redes sociales

Coordinación editorial: Florencia Valdés

Realización: Hadrien Toureaud y Victor Hul. 

Por:Aída Palau|Florencia Valdés