Internacional
Ataque aéreo que dejó al menos 34 personas muertas en Gaza
El Ataque
En un giro que podría haber sido escrito por Shakespeare si hubiera estado interesado en la política internacional, Israel ha decidido que la mejor manera de tratar con la situación en Gaza es bombardear una escuela de la ONU. No, no es un error tipográfico. Una escuela, repleta de familias palestinas desplazadas, se convirtió en el escenario de un ataque aéreo que dejó al menos 34 personas muertas, entre ellas 19 mujeres y niños. La Escuela Preparatoria de Niños Al-Jaouni en Nuseirat, probablemente pensando que su día sería como cualquier otro, se encontró en el punto de mira.
Las Reacciones
La UNRWA, que probablemente esperaba que su mayor problema fuera la burocracia, se encontró con la triste tarea de contar a sus propios muertos. Seis miembros del personal de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos se sumaron a la lista de víctimas. El Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, no pudo evitar sentirse como un personaje de tragedia griega, condenando el ataque y clamando por un fin a estas «violaciones dramáticas del derecho internacional humanitario».
Las Consecuencias
Mientras el mundo observa, Israel justifica sus acciones alegando que sus intenciones eran nobles, apuntando a militantes de Hamas que, según ellos, operaban desde la escuela. Decenas de miles de palestinos, sin hogar y sin esperanza, han buscado refugio en estas escuelas, solo para descubrir que la guerra no respeta los límites de la educación.
En un mundo donde la ironía se escribe con sangre, más del 90% de las escuelas de Gaza han sido dañadas, y la guerra continúa, con cada ataque dejando una marca indeleble en la historia de Gaza y en la conciencia mundial