Internacional
Catrinas Monumentales: El Espíritu de Toluca en el Día de Muertos
En Toluca, corazón del Estado de México, una tradición centenaria cobra vida cada octubre con la llegada del Día de Muertos. Este fin de semana, las calles y plazas de esta ciudad se han transformado en un escenario donde el arte popular y el folclore mexicano se entrelazan con la creatividad de sus habitantes, dando lugar a impresionantes figuras de Catrinas monumentales. Estas esculturas, elaboradas con materiales tan diversos como la madera, el papel y el cartón, no solo son una muestra de la habilidad artesanal local sino también un tributo a una de las celebraciones más emblemáticas de México.
Las Catrinas, personajes satíricos creados por José Guadalupe Posada a principios del siglo XX, simbolizan la muerte con elegancia y humor, recordándonos la fragilidad de la vida y la inevitabilidad del fin. En Toluca, estas figuras alcanzan alturas impresionantes, algunas de hasta varios metros, y son cuidadosamente diseñadas para capturar la esencia de la festividad. Los artesanos locales, con pasión y dedicación, construyen estas obras de arte, cada una con su historia y detalles únicos, que van desde adornos florales hasta vestimentas que reflejan distintas épocas y culturas mexicanas.
El proceso de creación de estas Catrinas es un acto comunitario. Familias enteras, escuelas y talleres artesanales se reúnen para planificar y construir estas monumentales figuras. La madera proporciona la estructura, el cartón se moldea para formar la ropa y los detalles, mientras que el papel, especialmente el papel picado, añade colorido y movimiento. Esta laboriosa tarea también se convierte en una oportunidad para educar a las nuevas generaciones sobre sus raíces y la importancia de mantener vivas las tradiciones.
Estas esculturas no solo engalanan Toluca, sino que también atraen a visitantes de todo el país y del extranjero, que buscan sumergirse en la rica cultura mexicana. Los turistas y locales pueden pasear entre las Catrinas, tomar fotografías, y participar en los festejos que incluyen altares de muertos, desfiles, música y baile. Esta celebración es un mosaico de colores, sonidos y olores que reflejan el amor y el respeto por los que ya no están, transformando el duelo en una fiesta de la vida.
Finalmente, las Catrinas monumentales de Toluca son mucho más que decoraciones; son un testimonio de la resistencia cultural y el ingenio mexicano. A través de ellas, los habitantes de Toluca no solo honran a sus difuntos, sino que también reafirman su identidad y la continuidad de una tradición que, con cada Día de Muertos, sigue evolucionando y ganando nuevos adeptos. Este año, como cada año, Toluca se viste de gala para recordar a los que se fueron, celebrando la vida en medio de la muerte, con la esperanza de que el legado de los ancestros continúe vivo en la memoria y el arte popular mexicano.