Cuba se Prepara para el Huracán Oscar en Medio de Apagón Nacional

Cuba se encuentra en alerta máxima ante la inminente llegada del huracán Oscar, previsto para impactar como categoría uno este domingo, mientras la isla aún se recupera de un apagón generalizado que ha dejado sin electricidad a casi la totalidad de sus 10 millones de habitantes por más de dos días. El presidente Miguel Díaz-Canel ha asegurado que se trabaja intensamente tanto para proteger a la población y los recursos económicos frente al huracán, como para restaurar el servicio eléctrico.

El mandatario informó a través de X que el servicio eléctrico ha comenzado a restaurarse parcialmente, con un 16% de la demanda ya atendida, aunque la mayoría de los cubanos pasaron otra noche sin luz, exacerbando la frustración y ansiedad en la población.

La avería en la central termoeléctrica Antonio Guiteras, la más importante de Cuba, desencadenó el colapso del sistema eléctrico nacional el viernes, dejando a ciudades como La Habana sumidas en la oscuridad, afectando no solo a los hogares sino también al transporte público y otros servicios esenciales.

La crisis eléctrica se suma a los ya existentes problemas de desabastecimiento de combustible, debido en parte al embargo de Estados Unidos, que dificulta la generación de energía. Esta situación ha llevado a prolongados apagones que afectan la vida cotidiana, desde la conservación de alimentos hasta la movilidad ciudadana, con un transporte público prácticamente paralizado.

Activistas como Carolina Barrero, desde el exilio en España, critican la gestión gubernamental y apuntan a la ineficiencia del sistema como la causa principal de la crisis, que abarca no solo la energía, sino también la alimentación y servicios básicos.

Ante esta emergencia, el gobierno ha paralizado trabajos estatales para concentrar esfuerzos en la crisis energética y la preparación ante el huracán. Los cubanos, entre la esperanza y la desesperación, esperan una pronta solución mientras enfrentan una de las peores crisis económicas en décadas, agravada por el impacto inminente de Oscar.