Internacional
Noche de masacre en Querétaro deja más marcas de la violencia en México
Querétaro, una ciudad conocida por su seguridad en México, enfrentó una noche de violencia sin precedentes el sábado 9 de noviembre de 2024. La tranquilidad de una de las ciudades más seguras del país fue interrumpida por un ataque armado en el bar «Los Cantaritos», ubicado en una de las avenidas más transitadas del centro histórico. Este evento no solo deja una marca en la comunidad local sino que también plantea serias preguntas sobre la supuesta seguridad que caracterizaba a Querétaro.
La masacre, perpetrada por cuatro sicarios armados, resultó en la muerte de diez personas y dejó a otras siete con heridas de diversa consideración. El ataque fue meticulosamente planeado, como lo demuestra la llegada de los agresores en una furgoneta, cuya matrícula fue identificada por las autoridades. Los asaltantes abrieron fuego indiscriminadamente contra los clientes presentes, causando pánico y caos en lo que antes era una noche de diversión.
El impacto del evento fue rápidamente compartido a través de redes sociales y medios de comunicación, con imágenes de videovigilancia que mostraban tanto la llegada de los sicarios como la huida desesperada de los clientes. Juan Luis Ferrusca Ortiz, titular de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Querétaro, confirmó los hechos y mencionó que una persona relacionada con el ataque ya se encontraba detenida, siendo puesta a disposición de la Fiscalía General.
El gobernador del estado, Mauricio Kuri, expresó su compromiso con la justicia y la seguridad, asegurando que todas las fuerzas de seguridad están movilizadas para esclarecer el caso y capturar a los responsables. Su mensaje a través de la plataforma X fue claro: no habrá impunidad para los perpetradores de este acto de violencia. Esta tragedia ha provocado un reforzamiento de las medidas de seguridad en Querétaro, con especial énfasis en la vigilancia de las fronteras del estado para evitar futuros incidentes de esta naturaleza.
Este suceso es un recordatorio de la fragilidad de la seguridad pública en cualquier parte del país, incluso en aquellas zonas que se creían relativamente inmunes a la violencia del crimen organizado. Querétaro, a pesar de su reputación, no está exenta de los problemas de seguridad que afectan a México en su conjunto.