Internacional
Denuncian Comentarios Racistas y Homófobos de Policías en Los Ángeles
El Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD) se encuentra bajo escrutinio tras la revelación de grabaciones secretas que exponen comentarios racistas, homófobos y sexistas realizados por varios agentes de su oficina de reclutamiento. La denuncia, presentada por un oficial latino con 10 años de servicio y reportada por el diario Los Angeles Times el 10 de marzo, ha desencadenado una investigación interna y ha reavivado el debate sobre la cultura policial en una de las fuerzas más grandes de Estados Unidos.
Según la acusación, las grabaciones –unas 90 en total– capturan a oficiales y supervisores de la División de Reclutamiento y Empleo del LAPD haciendo comentarios despectivos contra posibles reclutas y colegas, basados en su raza, género y orientación sexual. Entre los señalados están un teniente, un sargento y cuatro agentes, quienes fueron destituidos por el jefe Jim McDonnell en febrero tras conocerse las primeras evidencias. La queja, presentada por el abogado Gregory W. Smith en nombre del denunciante anónimo, alega que el teniente Louis Lavender, supervisor de la sección y de raza negra, fue testigo de estas conversaciones sin intervenir, e incluso bromeó sobre el riesgo de que el departamento terminara en titulares por tales actitudes.
El informante, que teme represalias, grabó las conversaciones entre octubre y diciembre de 2024, revelando frases como insultos hacia aspirantes afroamericanos, mujeres y miembros de la comunidad LGBTQ, además de prejuicios en la selección de oficiales. “Llegas justo a tiempo para la lucha en el barro desnudo”, le habría dicho un agente a Lavender en una de las grabaciones, a lo que este respondió: “Hombre, vamos a terminar en el L.A. Times por la forma en que todos ustedes hablan aquí”. Activistas como Earl Ofari Hutchinson y Hamid Khan, de Stop LAPD Spying, han calificado estos hechos como evidencia de un racismo “sistémico” arraigado en el LAPD, recordando episodios históricos como la golpiza a Rodney King en 1991.
La alcaldesa Karen Bass calificó los comentarios como “escandalosos e inaceptables”, mientras el concejal Tim McOsker expresó su decepción, señalando que contradicen años de esfuerzos por reformar el departamento. El LAPD confirmó que la investigación sigue en curso, con cooperación del Inspector General y Asuntos Internos, y que podrían aplicarse medidas disciplinarias más allá de los destituidos iniciales. Sin embargo, la Liga Protectora de la Policía, sindicato del LAPD, ha pedido responsabilidad tanto a los agentes como a sus líderes por “fallos de supervisión”.
Este escándalo llega tras otros casos de discriminación en el LAPD y en un momento en que el departamento busca aumentar su fuerza laboral, lo que plantea desafíos para su imagen y proceso de contratación. La denuncia también menciona irregularidades como la falsificación de tarjetas de tiempo y la divulgación de información confidencial, ampliando el alcance de las acusaciones. Mientras las grabaciones se analizan, Los Ángeles enfrenta una vez más cuestionamientos sobre la confianza en su policía y la necesidad de reformas estructurales.