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Florida Refuerza Seguridad en Puntos Turísticos para el Spring Break

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Las autoridades estatales y locales de Florida anunciaron este martes la implementación de estrictas medidas de seguridad en los principales puntos turísticos del estado, con el objetivo de prevenir desmanes durante el receso de primavera, conocido como Spring Break. La temporada, que atrae a miles de estudiantes y visitantes entre marzo y abril, estará marcada por una fuerte vigilancia policial en áreas clave como Miami Beach, Fort Lauderdale y Daytona Beach.

El gobernador Ron DeSantis, en coordinación con los departamentos de policía de Miami-Dade y Broward, detalló que el plan incluye el despliegue de más de 500 agentes adicionales, el uso de tecnología de reconocimiento facial en zonas concurridas y la instalación de puntos de control vehicular para detectar armas y drogas. “No toleraremos el caos ni la violencia. Queremos que los visitantes disfruten, pero dentro del marco de la ley”, afirmó DeSantis en una conferencia de prensa desde Miami Beach, una de las áreas más afectadas por disturbios en años anteriores.

Las medidas responden a incidentes pasados durante el Spring Break, como los registrados en 2023 y 2024, cuando se reportaron tiroteos, arrestos masivos por consumo de alcohol en vía pública y peleas callejeras que dejaron dos muertos y decenas de heridos en South Beach. Este año, las autoridades también impondrán toques de queda nocturnos en zonas específicas, prohibirán el consumo de licor en playas después de las 6:00 p.m. y aumentarán las multas por alteración del orden público, que podrían llegar hasta los USD 1.000.

El alcalde de Miami Beach, Steven Meiner, destacó que se instalarán cámaras de alta definición y drones para monitorear en tiempo real las áreas de Ocean Drive y Collins Avenue, puntos neurálgicos del turismo primaveral. “El mensaje es claro: ven a divertirte, pero respeta las reglas. No permitiremos que unos pocos arruinen la experiencia para todos”, señaló Meiner, quien también anunció operativos conjuntos con la Patrulla de Carreteras de Florida para controlar el acceso a la ciudad desde la I-95.

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La iniciativa, que comenzó a implementarse este 10 de marzo y se extenderá hasta finales de abril, busca garantizar la seguridad de los 1.5 millones de visitantes esperados, según estimaciones de la Oficina de Turismo de Florida. Aunque algunos comerciantes temen que las restricciones afecten los ingresos –que en 2024 superaron los USD 2.300 millones–, la mayoría de los residentes apoya las medidas tras años de quejas por el descontrol durante las vacaciones. El refuerzo de seguridad en Florida llega en un momento en que el estado también lidia con debates migratorios y tensiones regionales tras la salida de Chevron de Venezuela.

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