Internacional
Nayib Bukele Propone a Nicolás Maduro un Intercambio de 252 Deportados Venezolanos por Presos Políticos
En un movimiento audaz, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, propuso al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, un intercambio humanitario que involucra a 252 venezolanos detenidos en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) de El Salvador, deportados desde Estados Unidos, a cambio de la liberación de 252 presos políticos en Venezuela. La oferta, anunciada el 20 de abril a través de un mensaje en X, incluye nombres clave de la oposición venezolana y extranjeros encarcelados, marcando un nuevo capítulo en la confrontación verbal entre ambos líderes.
Bukele, conocido por su estilo directo, enfatizó que los venezolanos bajo custodia salvadoreña son presuntos miembros del Tren de Aragua, una organización criminal transnacional, capturados en operativos contra pandillas tras ser deportados el 16 de marzo de 2025 bajo la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, impulsada por el presidente estadounidense Donald Trump. “A diferencia de usted, que tiene presos políticos, nosotros no tenemos presos políticos. Nuestros detenidos han asesinado, violado o delinquido repetidamente”, afirmó Bukele, contrastando esto con los presos políticos venezolanos, encarcelados “solo por oponerse a usted y a sus fraudes electorales”.
La lista de presos políticos que Bukele busca liberar incluye figuras prominentes:
- Rafael Tudares, yerno del excandidato presidencial Edmundo González, detenido desde julio de 2024 por presunta conspiración.
- Roland Carreño, periodista de Voluntad Popular, arrestado en 2020 acusado de financiar terrorismo.
- Rocío San Miguel, abogada y activista de derechos humanos, encarcelada en 2024 por supuestos delitos de traición.
- Corina Parisca de Machado, madre de María Corina Machado, sometida a hostigamiento continuo.
- Cuatro dirigentes opositores asilados en la embajada de Argentina en Caracas, junto a 50 ciudadanos de nacionalidades como estadounidense, colombiana, ecuatoriana, mexicana, española y otras, detenidos por motivos políticos.
El presidente salvadoreño anunció que la Cancillería de su país enviará una comunicación formal para avanzar en el acuerdo, al que calificó como “humanitario”. La propuesta se produce en un contexto de tensiones, ya que Maduro ha denunciado las deportaciones como un “secuestro” y negado que los detenidos pertenezcan al Tren de Aragua, mientras su gobierno busca su repatriación.
La detención de los 252 venezolanos en CECOT, una megacárcel criticada por organizaciones de derechos humanos por condiciones inhumanas y falta de debido proceso, ha avivado el debate. Bukele insiste en que los deportados son delincuentes de alto perfil, pero reportes de Amnistía Internacional y Human Rights Watch sugieren que algunos podrían ser migrantes sin antecedentes, atrapados en redadas masivas. En Venezuela, la oposición ha aplaudido la iniciativa de Bukele, viéndola como una presión sobre Maduro, mientras el oficialismo la considera una maniobra propagandística.
Hasta el momento, Maduro no ha respondido directamente a la oferta, aunque figuras como Diosdado Cabello han cuestionado la narrativa salvadoreña. La propuesta de Bukele, que combina diplomacia pública y desafío político, pone a prueba la disposición de Maduro a negociar la liberación de presos políticos, un tema sensible en la crisis venezolana.
