Internacional
Cristina Kirchner solicita prisión domiciliaria tras confirmarse su condena por corrupción
La expresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, solicitó este miércoles cumplir en su apartamento del barrio Constitución, en Buenos Aires, la condena de seis años de prisión por administración fraudulenta, ratificada el martes por la Corte Suprema. La sentencia, que incluye inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, se deriva del desvío de fondos en contratos de obras públicas en Santa Cruz durante su mandato (2007-2015). La exmandataria tiene cinco días hábiles para entregarse ante el tribunal federal, según el fallo judicial.
El abogado defensor, Carlos Beraldi, pidió prisión domiciliaria argumentando que Kirchner, de 72 años, cumple con los requisitos legales para mayores de 70 años. “No pedimos privilegios, sino el mismo tratamiento que cualquier persona en su situación jurídica”, afirmó Beraldi ante la prensa. También destacó el atentado fallido contra Kirchner en 2022, cuando un hombre intentó dispararle sin que las balas salieran, señalando que los autores intelectuales aún no han sido identificados, lo que justificaría medidas de seguridad adicionales.
La defensa presentó una denuncia ante la Corte Penal Internacional (CPI), alegando “persecución política” contra la líder peronista. Kirchner, por su parte, calificó a los tres jueces de la Corte Suprema de “monigotes” y afirmó ante simpatizantes que la sentencia “ya estaba escrita” antes del juicio. Desde Israel, el presidente Javier Milei celebró el fallo en X con un escueto “Justicia. Fin”, mientras la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, subrayó que el proceso contó con “tres instancias, cientos de pruebas y todas las garantías del debido proceso”.
La confirmación de la condena ha intensificado la polarización en Argentina, con manifestaciones de apoyo a Kirchner frente a su residencia y críticas de sectores opositores que exigen el cumplimiento inmediato de la pena. La resolución de la solicitud de prisión domiciliaria y la respuesta de la CPI serán determinantes para el futuro político y judicial de la exmandataria, cuya influencia en el peronismo sigue siendo significativa.
