Política
Alias “Fito” a un Paso de la Extradición a EE.UU.: Solo Falta la Firma de Noboa
José Adolfo Macías Villamar, alias “Fito”, líder de la organización criminal Los Choneros, está a un paso de convertirse en el primer ecuatoriano extraditado a Estados Unidos tras la aprobación de su solicitud por la Corte Nacional de Justicia (CNJ) el 16 de julio. El presidente de la CNJ, José Suing, dictaminó que las garantías presentadas por EE.UU. aseguran que Macías no enfrentará torturas, tratos inhumanos ni la pena de muerte, cumpliendo con los requisitos constitucionales de Ecuador. Ahora, solo falta la firma del presidente Daniel Noboa para concretar la entrega, un trámite que se espera sea favorable dado el respaldo del gobierno a la extradición.
Macías, recapturado el 25 de junio de 2025 en un búnker oculto en Manta durante el operativo “Gran Fénix 28”, aceptó su extradición en una audiencia virtual el 11 de julio, declarando: “Sí, acepto, señor juez”. Enfrenta siete cargos en Nueva York por narcotráfico, conspiración y contrabando de armas, relacionados con el envío de miles de toneladas de cocaína a través de puertos ecuatorianos, en alianza con el Cártel de Sinaloa y el Clan del Golfo. Su escape de la Cárcel Regional de Guayaquil en enero de 2024 desató una ola de violencia, incluyendo atentados, secuestros y el asalto a un canal de televisión, lo que llevó a Noboa a declarar un “conflicto armado interno”.
El proceso, iniciado tras un referéndum en abril de 2024 que habilitó la extradición de ecuatorianos, requiere la notificación a EE.UU. a través de canales diplomáticos y a Macías sobre la fecha y lugar de entrega. La Policía Nacional coordinará la transferencia una vez que Noboa firme los documentos, un paso que podría completarse en los próximos 15 a 30 días, según expertos legales. El ministro del Interior, John Reimberg, celebró la decisión como un “mensaje claro” contra el crimen organizado, aunque analistas advierten que la extradición podría desencadenar disputas internas en Los Choneros, intensificando la violencia en Manabí y Guayas.