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Camacho-Quinn asombra con 12.41 en series de 100 m vallas
La atleta puertorriqueña Jasmine Camacho-Quinn arrebató el protagonismo a las grandes figuras que compitieron la mañana del sábado en el estadio con su gran marca en 100 metros vallas, 12,41, la mejor de la historia en unas eliminatorias olímpicas.
Sucedió en la quinta y última serie. Jasmine, nacida en Charleston (EEUU) hace 24 años y residente en Orlando (Florida), rebajó los 12.54 de la estadounidense Brianna McNeil que hasta hoy figuraban como el mejor registro en la primera ronda de unos Juegos.
La puertorriqueña eclipsó el paso de grandes figuras como el pertiguista sueco Armand Duplantis, plusmarquista mundial con 6,18, o su predecesor, el francés Renaud Lavillenie, que derribaron el listón en su primer intento sobre 5,50 aunque terminaron ganándose el puesto en la final del 3 de agosto con sendas marcas de 5,75.
En ella, gracias al mismo registro, estará también el defensor del título olímpico, el brasileño Thiago Braz. La marca de clasificación automática era 5,80 metros, pero bastó con 5,65 para estar entre los doce mejores que accedieron a la lucha por las medallas.
Las series femeninas de 400 m vallas ratificaron como favoritas a las estadounidenses Dalilah Muhammad, campeona mundial, que lideró el ránking con 53.97, y Sydney McLaughlin, plusmarquista mundial, que corrió en 54.65 sin despeinarse.
La holandesa Femke Bol, campeona de Europa en sala, firmó el segundo mejor registro en esta primera ronda (54.43).
En las series de 800 destacó la figura del keniano Ferguson Rotich, medallista de bronce en los últimos Mundiales, que ganó su serie 1:43.75, la mejor marca de la historia en unos Juegos conseguida fuera de la final.
La segunda jornada de atletismo en Tokio 2020 ofrece en la sesión vespertina la gran final femenina de 100 metros, en la que la jamaicana Shelly-Ann Fraser-Price intentará conseguir su tercera medalla de oro.
También se disputarán la final masculina de disco y la de relevos mixtos 4×400 metros. EFE