Lima, 12 dic (EFE).- Al menos 15 policías peruanos resultaron heridos este lunes en la provincia de Andahuaylas, en el sureño departamento de Apurimac, en un ataque con explosivos por parte de manifestantes que exigen la destitución de la presidenta Dina Boluarte y el cierre del Congreso, informó la Policía Nacional de Perú (PNP).
Los efectivos policiales fueron atacados con artefactos pirotécnicos y con un «queso», nombre con el que se le conoce a un explosivo de fabricación casera que contiene dinamita y perdigones, detalló la PNP en un comunicado en el que agregaron que dos se encuentran con «pronóstico reservado» y tres con heridas múltiples.
Los agentes heridos de la Dirección de Operaciones Especiales, personal de la División Policial Andahuaylas y de la División de Maniobras Contra el Tráfico Ilícito de Drogas -Los Sinchis de Mazamari- fueron atendidos en los centros sanitarios de la zona, ya que el hospital de Andahuaylas está colapsado.
«Un número indeterminado» de manifestantes ejecutó el ataque con explosivos a las autoridades peruanas, según la PNP.
En un video al que EFE tuvo acceso, se puede apreciar cómo al menos una decena de agentes habían sido heridos tras un enfrentamiento con manifestantes.
«Tras las violentas manifestaciones ocurridas esta mañana en el sur del país, nuestros efectivos de la Dirección de Operaciones Especiales que resultaron heridos con objetos contundentes y explosivos, fueron trasladados de manera inmediata a Lima para ser atendidos en el hospital central de la Policía Nacional», denunció la institución en redes sociales.
Los agentes tuvieron que ser trasladados a la capital, ya que el hospital Hugo Pesce Pescetto de la ciudad de Adahuaylas está colapsado, entre otros motivos, por los ataques de los manifestantes al personal de salud, según condenó este lunes el Ministerio de Salud en un comunicado.
Según los datos que la defensora del pueblo, Eliana Revollar, dio a conocer en una entrevista con el canal Epicentro TV, el departamento de Apurimac suma seis fallecidos en poco más de 24 horas, cuatro de ellos en la provincia de Andahuaylas y otros dos de ellos en la provincia de Chinchero.
Han sido dos jornadas muy lamentables con un saldo de siete personas fallecidas (…) dos de ellas menores de edad y todos por proyectiles de armas de fuego», lamentó Rotellar.
Ante estas cifras de muertos y heridos, la PNP exhortó a los manifestantes a que ejerzan la libertad de expresión de forma pacífica. EFE
